Ayer por la tarde, Richard no estaba muy contento.
No tenía motivos para ello y observaba con resignación el partido de Venus y Radwanska, pero forma parte del duro mundo del deporte.
Con todo, sus hijas han protagonizado una interesante gira en la arcilla europea en 2012, con la victoria en Madrid de Serena como más destacado, y siempre con la condición de que la arcilla no es la superfície favorita de las hermanas.
Ahora toca en breve la hierba, y las Williams llegan a su jardín favorito, en Wimbledon, donde tantas alegrías se han llevado.
Quizás en unos días, la cara de Richard cambie de gesto..
A disfrutar de la vida amigos, que es corta y un mal torneo lo puede tener cualquiera!!
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